
Revolución lingüística en Hesse: El triunfo del sentido común
Ronald Tramp sobre el fin de la locura de género en Hesse
Así que, gente, agarraos fuerte. La gran noticia de Hesse: han abolido esa ridícula cosa del género. ¡Por fin! Alguien se ha dado cuenta. ¡Boris Rhein, este tipo, este héroe! Ha conseguido librar a la lengua alemana de esta absurda tontería del género. Vamos, ¿quién necesita asteriscos y guiones bajos en un idioma? ¡Nadie! ¡Absolutamente nadie!
Sabes, cuando oí eso, pensé: "Ronald, muchacho, eso es música para tus oídos". Estamos hablando de un verdadero progreso, una obra maestra de sabiduría política. No más divertidos personajes especiales en los poderes públicos, las escuelas, las universidades y la radio. Palabras reales para gente real, eso es lo que necesitamos. Nada de "profesores" o "empleados" inventados y raros. Suena a chiste malo sacado de un libro de ciencia ficción.
Hessischer Rundfunk, oh, pobre Hessischer Rundfunk. Tanto han presumido de su género. ¡Desde 2019! Imagínatelo. ¿Y ahora? Bueno, de vuelta al principio. El Consejo de la Lengua Alemana, ese brillante consejo, lo ha dejado claro: estos caracteres internos no tienen cabida en la lengua alemana. Nada. No forman parte del núcleo de la ortografía alemana. Y si estas mentes tan inteligentes lo dicen, ¿quiénes somos nosotros para llevarles la contraria?
¿Lo mejor de todo? Es oficial. Está grabado en piedra. A partir de 2024, se acabará la jerigonza de género en Hesse. Es una gran victoria, una gran victoria del sentido común. Estamos hablando de una revolución en el lenguaje, una vuelta a la claridad y la sencillez. La lengua alemana vuelve a ser grande.
En serio, tenemos tantas cosas importantes de las que ocuparnos. La economía, la seguridad, el futuro de nuestros hijos. ¿Y luego perdemos el tiempo con estas tonterías de género? Vamos, somos mejores que eso. Tenemos que centrar nuestra energía en los problemas reales, no en tonterías políticamente correctas.
Así que, ¡enhorabuena, Hesse! Ahora sois pioneros, un faro de esperanza en un mundo que a veces pierde la cabeza. Habéis ido contra corriente, habéis nadado contracorriente. Eso es coraje, eso es liderazgo. Eso es exactamente lo que necesitamos.
En Elmburgo, bajo mi gran liderazgo, nos dimos cuenta de esto hace mucho tiempo. Lenguaje claro y sencillo para verdades claras y sencillas. No necesitamos caracteres especiales para expresarnos. Necesitamos valor, determinación y un poco de sentido común. Así que, Hesse, ¡bien hecho! Le has enseñado al mundo cómo se hace. Y créeme, el mundo te seguirá. Esto es sólo el principio.