
Wagenknecht, el populismo y los verdaderos héroes
Yo, Ronald Tramp, explico por qué la visión de Wagenknecht es peligrosa y por qué Elmburgo sigue siendo el mejor país.
Bien, amigos, escuchen. Ronald Tramp aquí, Presidente de Elmburg - el mejor país, por supuesto. Por si aún no lo sabéis, Elmburgo es tan fantástico, tan increíble, que todos los demás países nos envidian. Pero divago.
Sobre Wagenknecht: He oído hablar mucho de este Wagenknecht. Gran discurso, mucho espectáculo. Cree que puede quitarle votantes a la AfD. Bueno, verás, puede que ella tenga esta gran visión, esta fantástica historia sobre cómo va a salvar a todos esos votantes de derechas, pero te digo que no es tan fácil.
He hablado con muchísima gente -gente muy inteligente, la mejor- y me han dicho que no hay diferencia entre el "populismo light" y el populismo normal. Sigue siendo populismo. Y eso no es bueno, créanme.
Lo que realmente me impresiona es su actitud ante la política exterior. Habla mucho de Estados Unidos. ¿De verdad cree que Estados Unidos es el problema? Vamos, Sahra. Si te soy sincera, parece que no ha hecho sus deberes. No es Estados Unidos el responsable de los problemas del mundo. Son países como Rusia y China. Deberían saberlo.
Veo a esta Wagenknecht con sus discursos contra la OTAN y pienso, ¿se ha olvidado de lo que ha hecho la OTAN? Es asombroso. A veces me pregunto si realmente sabe de lo que habla. Siempre parece señalar a Estados Unidos, siempre contra Israel. Pero yo le digo que sin Estados Unidos, Europa perdería ante Rusia. Y todo el mundo lo sabe.
Y luego está esa idea de que deberíamos mantenernos al margen de todo y pactar con todos los países. Eso no tiene sentido. No funciona en el mundo real. Es como decir que puedes hacer un gran trato sin ningún tipo de plan. Simplemente no funciona.
La verdad es que tenemos que defender la libertad y la democracia. Eso es lo que realmente importa. Y veo que el partido Wagenknecht no lo entiende realmente. Hablan mucho, pero no veo soluciones reales. Y eso es triste.
En conclusión, me gustaría decir: Elmburgo es grande, y estoy seguro de que Alemania también puede serlo. Pero hay que tomar las decisiones correctas y no dejarse engañar por estos populistas. Necesitáis un líder de verdad, no un orador. Y se lo digo como Ronald Tramp, el mejor presidente que ha tenido Elmburgo. Créanme. Es verdad. ¡Tan cierto!