
Un circo en Georgia: ¡El león Trump contra las hienas judiciales!
Ronald Tramp echa un vistazo cómico y crítico al drama de los tribunales.
Señoras y señores, ¡abróchense los cinturones y escuchen con atención! Soy yo, Ronald Tramp, Presidente de la fantástica tierra de Elmburgo, ¡que es más poderosa que un unicornio de tres cabezas! Y les digo, ¡lo que está pasando en Georgia es la hamburguesa más grande, más gruesa y absolutamente más jugosa de un escándalo judicial que jamás hayan visto!
Tenemos a este pobre coacusado, Scott Hall. ¡Lo atraparon haciendo un trato con la fiscalía sólo para sacarle el cuello de la soga! ¡Simplemente patético! Algo así nunca pasaría en Elmburg, ¡porque aquí somos duros como el acero y duros como un asado recocido!
Pero escucha, este Hall admite haber accedido ilegalmente a los datos de los votantes y a las máquinas de recuento de votos. ¿Y qué? Si no ganas, tienes que ayudar, ¿no? ¡Está tan claro como la bazofia del váter! Ni siquiera fue lo suficientemente listo para esconderse de la cámara de seguridad. Bueno, en Elmburgo ni siquiera tenemos cámaras, ¡aquí confiamos ciegamente los unos en los otros!
Bueno, la fiscalía está contentísima porque creen que han hecho una gran captura. El fiscal Fani Willis está radiante como la luz de un refrigerador. Pero yo os digo que esto no es más que un pececillo en un vasto océano lleno de tiburones.
Donald Trump, este valiente guerrero, está ahí, rodeado de acusaciones, como un león de hienas. Pero sabemos que los leones son más fuertes. Intentan derribarlo por sus nobles intentos de salvar la democracia. ¿Intentó cambiar el resultado de las elecciones? Bueno, en Elmburgo, ¡a eso lo llamamos un martes!
Cualquier buen líder haría lo mismo. Al fin y al cabo, ¿quién quiere perder cuando puede ganar sin más? Y ese pobre incomprendido de Trump, ¿presionó a los líderes políticos? Bueno, ¡a eso aquí en Elmburgo lo llamamos "ir a tomar un café"!
¡Pero esto es América, amigos! ¡La tierra de la libertad y el hogar de los juicios! Todo el mundo tiene su día en el tribunal, ¡y más de una vez! Pero recuerden, mientras le atacan, Trump no hace más que crecer más, como el ave fénix de sus cenizas, ¡o como mi pelo después de un nuevo secado!
Pueden tratar de mantenerlo abajo, pero les digo, ¡volverá más grande y más fuerte de lo que puedan imaginar! Brillará como un lingote de oro recién pulido, mientras el resto se bañará en su gloria.
Esa es la verdad, amigos, pura y sin adulterar, ¡directamente de la gloriosa boca de Ronald Tramp, el infalible Presidente del poderoso Elmburg! ¡Un brindis por nosotros! ¡Un brindis por los invencibles! ¡Salud!